Ojeando el artículo 252 del Reglamento de Competición 2018-2019 de la ASOCIACIÓN INTERNACIONAL DE FEDERACIONES DE ATLETISMO, en marzo de este año han clasificado las carreras por montaña no en base a la distancia como era anteriormente, donde además no se tenía en cuenta el desnivel, si no que se basa en los “Km-esfuerzo” como los que son utilizados para asignar punto ITRA (calculados sumando la distancia (en km) y la centésima parte del desnivel positivo (en m)).
Los nuevos puntos, definidos según los nuevos límites, ya se aplicarán a todas las carreras de las ediciones 2019 y posteriores.
El valor Km-esfuerzo se obtiene de la formula: [km-esfuerzo = distancia (kms) + desnivel (m+) / 100.
La nueva clasificación bajo mi punto de vista, se atiene a criterio y a un razonamiento lógico y real. Un corredor de talla internacional en una carrera de la categoría M (ejemplo: transvulcania), finaliza la prueba en un tiempo de 7 horas, en tanto un corredor popular puede llegar a tardar 14 horas en alcanzar la meta. Estableciendo este caso a modo de ejemplo, es donde justifico el razonamiento lógico de la IAAF a la hora de enmarcar las carreras por montaña.
Como preparador físico de corredores de montaña, recibo de éstos cada temporada el calendario de competiciones donde figuran proyectos muy ambiciosos elaborados cómodamente desde el sillón, pero esto hay que trasladarlo a la montaña, lo que implica horas de entrenamiento y dedicación. Entrados de lleno en temporada el corredor a veces se ve desbordado por los entrenamientos y las horas que debe invertir en la montaña. Se empiezan a contabilizar entrenamientos no completados al igual que desniveles no alcanzados, y es que como entrenador, a la hora de desarrollar el planning a seguir, establezco las pautas del mismo en virtud a los requerimientos fisiológicos del objetivo, entrenando la resistencia – dependiendo de la capacidad y experiencia del corredor – antes que la velocidad o la potencia.
En base a lo anterior, es aquí donde vienen las preguntas de los corredores respecto a sus entrenamientos: Si entreno para un maratón (ejemplo: maratón alpino madrileño 46 Kms – 5300m desnivel acumulado), ¿qué sentido tiene hacer 6 horas con 1500 metros de desnivel positivo?
Para responder a la pregunta y mejor entendimiento del lector, según los datos del párrafo anterior, en el cuadro de clasificaciones de las carreras por montaña de la IAAF, el MAM estaría clasificado en la categoría de Trail (S), donde el tiempo del ganador posiblemente se situé en poco más de 4 horas. Vistas la clasificaciones de dicha prueba el grueso de la clasificación general habrá entrado en meta en tiempo superiores a las 6 horas, por lo tanto, el corredor que hacía la pregunta, de un nivel intermedio, desde el plano fisiológico deberá entrenar como si se tratara de una prueba tipo (M), dado que el día de la competición el esfuerzo que deberá de soportar estará encuadrado en una categoría superior a la que en realidad compite. De esta manera y de una forma sencilla trato de justificar el entrenamiento específico de 6 horas en la montaña con su consiguiente desnivel en función del tiempo real que posiblemente invertirá el corredor y no sobre la distancia. He considerado apropiado apoyar esta conclusión sobre la tabla de las categorías para mayor compresión.
No conviene dejarse impresionar por los videos que promocionan una carrera de ultra-trail, o las campañas de mailing que publicitan las mismas y adéntranos en las carreras de trail running en la modalidad de ultra distancia sin tener en cuenta de donde venidos y hacía donde vamos, siendo que un objetivo en el apasionante mundo de las carreras por montaña requieren un entrenamiento de al menos 6 meses, y una adecuada progresión hacía distancias superiores rondaría los 3 años para conseguir el pleno dominio de la distancia actual.
Además de lo anterior, solo la disponibilidad en tiempo, la actitud de cara al entrenamiento y una adecuada planificación te harán vencer o fracasar.
JuanAn Morenno
Entrenador Trail-Running | Preparador Físico
Técnico deportivo en montaña